REMEDIOS HOMEOPATICOS

jueves, 29 de noviembre de 2012


SINUSITIS
El término sinusitis corresponde a un proceso inflamatorio que afecta a los cuatro senos paranasales que están junto a la cavidad nasal. Estos senos corresponden a cavidades de los huesos maxilares, frontal, etmoides y esfenoides.



La mayor parte de los casos de sinusitis afectan a varios senos, pero el que se afecta con mayor frecuencia es el seno maxilar, seguido en frecuencia por los senos etmoidales, frontales y esfenoidal. 
Cada seno está recubierto o tapizado internamente por un tejido o mucosa  que produce moco el cual es expulsado por acción de unos filamentos a semejanza de un cepillo denominados los cilios, este moco se elimina a través de orificios que comunican a los senos con la cavidad nasal. En circunstancias normales no se acumula el moco en el interior de los senos, los cuales permanecen estériles a pesar de estar muy cerca de las vías nasales en que abundan las bacterias. Sin embargo, si se obstruyen los orificios de salida de los senos y si hay deficiencia o ausencia del mecanismo de limpieza por parte de los cilios, puede haber retención de las secreciones y surgir así los signos y síntomas típicos de la sinusitis. 



Las secreciones retenidas pueden infectarse por diversos microbios, como virus, bacterias y hongos. La sinusitis es tan común que ocupa el quinto lugar como entidad en la cual se administran antibióticos.
Se clasifican típicamente según la duración de la enfermedad en aguda o crónica.

Sinusitis aguda
Se define como la inflamación de los senos paranasales que dura menos de cuatro semanas y comprende la mayor parte de los casos. 
Aparece por lo regular posterior a un cuadro respiratorio viral, es decir casi siempre después de un resfriado. Es difícil diferenciar sobre bases clínicas entre las sinusitis agudas de origen bacteriano y vírico. En consecuencia, no es de extrañar que se administren frecuentemente antibióticos (en 85 a 98% de los casos) contra dicho trastorno.


Causas
Diversos factores infecciosos y no infecciosos contribuyen a la obstrucción aguda de los orificios sinusales o a la deficiencia en los mecanismos de limpieza por cilios y, como consecuencia, a la aparición de sinusitis.

Entre los factores no infecciosos están:
-Rinitis alérgica (con edema de la mucosa u obstrucción por pólipo), 
-Barotraumatismo (por bucear en aguas profundas o viajar en aeroplanos)
-Irritantes químicos.
-Tumores malignos o benignos
-Enfermedades que alteran la composición del moco (como la fibrosis quística) causan sinusitis al afectar al mecanismo de limpieza del moco por medio de los cilios
-La intubación nasotraqueal constituye el principal factor de riesgo de
Se han descrito en mayor detalle las bacterias que originan la sinusitis; entre los casos atribuibles a contagio extrahospitalario están los patógenos S. pneumoniae y Haemophilus influenzae no tipificable como los más comunes, porque causan 50 a 60% de los casos.
Moraxella catarrhalis origina enfermedad en un porcentaje importante de niños (20%), pero es menor su frecuencia en los adultos. Otras especies de estreptococos y de Staphylococcus aureus causan un pequeño porcentaje casos. A veces se identifican anaerobios en infecciones de las raíces de premolares, que se propagaron al seno maxilar vecino.
Los casos nosocomiales por lo regular son producidos por bacterias que están en el entorno hospitalario como S. aureus, Pseudomonas aeruginosa, Serratia marcescens, Klebsiella pneumoniae y especies
de Enterobacter. A menudo los cuadros en cuestión son polimicrobianos e intervienen microorganismos muy resistentes a diversos antibióticos. Los hongos también son microorganismos que, sin duda, originan sinusitis, aunque la mayoría de los cuadros agudos causados por ellos se observan en sujetos inmunodeficientes y constituyen infecciones invasivas que pueden ser mortales.
El ejemplo mejor conocido es la mucormicosis rinocerebral causada por miembros del orden Mucorales como Rhizopus, Rhizomucor, Mucor, Absidia y Cunninghamella. Las infecciones en cuestión también pueden afectar a diabéticos con cetoacidosis, aunque a veces afectan a personas que han recibido órganos en trasplante, individuos con cánceres hematológicos y otros que han recibido por largo tiempo glucocorticoides o deferoxamina. Causas ocasionales de la enfermedad han sido otros mohos hialinos, verbigracia, especies de Aspergillus y Fusarium.

Manifestaciones
La mayor parte de los casos de sinusitis aguda surgen después de un resfriado o junto con el, por lo cual es difícil diferenciar las manifestaciones clínicas de una y otra. Una proporción importante de sujetos con resfriados muestra inflamación de senos paranasales, si bien la sinusitis bacteriana complica sólo 0.2 a 2% de dichas infecciones víricas. Los síntomas iniciales frecuentes de la sinusitis comprenden:
-Secreción nasal y congestión de vías nasales
-Dolor o sensación de presión en la cara y dolor de cabeza.
-Secreción nasal espesa, purulenta
-Tos, estornudos y fiebre.
-Dolor dental, con mayor frecuencia en los molares inferiores
-Halitosis.
En la sinusitis aguda, el dolor sinusal o la sensación de presión suele localizarse en el seno afectado (en particular el del maxilar) y puede empeorar cuando la persona flexiona la cintura hacia adelante o está acostado boca arriba. Aunque es poco frecuente, a veces los síntomas de sinusitis esfenoidal o etmoidal avanzada pueden ser profundos y producir un dolor intenso en la frente o detrás de los ojos, dolor que
irradia hacia atrás de la cabeza.
Entre las complicaciones que pueden ser mortales están meningitis, osteomielitis y los abscesos  cerebrales.

Sinusitis crónica
Esta enfermedad se caracteriza por síntomas de inflamación sinusal que duran más de 12 semanas. El trastorno suele ser producido por bacterias u hongos y por lo regular muchos pacientes han sido sometidos a ciclos repetidos de antibacterianos y múltiples operaciones de los senos, lo cual ha agravado el peligro de colonización con bacterias resistentes a antibióticos y de complicaciones quirúrgicas.
En la sinusitis bacteriana crónica, se piensa que la infección depende de la deficiencia del mecanismo de limpieza mucociliar, por infecciones repetidas y no por infección bacteriana persistente. Sin embargo, se sabe poco de la patogenia de este trastorno. Algunos problemas como la fibrosis quística predisponen a los sujetos a la sinusitis bacteriana crónica, pero la mayoría de los enfermos con este
cuadro no tienen un trastorno primario obvio que obstruya el drenaje de los senos, no hay deficiencia de la acción de los cilios, ni disfunción inmunitaria. Los enfermos presentan constantemente congestión nasal y sensación compresiva en los senos, con períodos intermitentes de exacerbaciones, que a veces persisten años. La tomografía computadorizada puede resultar útil para definir la magnitud de la enfermedad y la reacción al tratamiento. 

REMEDIOS HOMEOPATICOS MAS EFECTIVOS:
Los que tienen una acción organotrópica, que actuan sobre la enfermedad, sobre los tejidos enfermos:
Sticta P., Kali Bich, Hepar Sulfur, Mercurius S.